viernes, 19 de agosto de 2011

El artista del engaño

El artista del engaño desvía con facilidad a los seguidores del camino, entonces ¿que se puede decir de quien desconoce el sentido y la razón de su existencia?
Las buenas intenciones solas no bastan en el curso del camino, tenemos que esforzarnos por tener un ritmo de vida consagrado a la voluntad férrea del camino cual es construir en nuestro interior fe y acción de día y de noche comprometernos en la obra del Cristo, que es el sendero que conduce a las almas a la liberación y al Reino de la Luz.
El solo deseo de hacer las cosas no basta, se debe cruzar por el mar tempestuoso de las amarguras y de las dificultades, ser firme ante las pruebas es vital y necesario para purificar el oro en la más ardiente templanza de la fe y de la constancia.
Vivir en la oscuridad es fácil, pues no nos compromete al trabajo solo somos presa del destino, del dolor, de las circunstancias de la cotidianidad.
Vivir dormido implica reaccionar a todo propósito y deseo del príncipe del engaño, es urgente volvernos fuertes en nuestras necesidades espirituales, debemos hacer de nuestra voluntad un arma una espada que nos proteja nos de la firmeza y constancia.
En muchas ocasiones en el momento del descanso del cuerpo físico, a las almas se les lleva a lugares, regiones y encuentro con personajes para despertarles sobre sus intenciones y propósitos primarios, pero pocos somos observadores y conscientes de estos mensajes, aun a estos se les hace caso omiso y buscamos por todos los medios ignorarlos.
El artista del engaño no está solo el tiene sus secuaces, sus colaboradores quienes desde lo más interno de la mente controlan nuestra voluntad, es la voluntad hacia la búsqueda la que tenemos que forjar y afirmar, porque es ésta la que el enemigo primero ataca, volviéndola frágil y presa de sus malsanas intenciones.
Tiene sentido nuestra vida, si entregamos todos nuesrtros anhelos y propósitos al sendero a la unción con Cristo

miércoles, 3 de agosto de 2011

La escuela

La escuela es la vida, el aprendizaje es el sentido y la misión de todo ser en este plano y aun en otros en donde se debe seguir el aprendizaje y progreso para avanzar en la escala del deber cósmico.
Pero lo triste es ¿cómo avanzar y progresar en el mundo de los sueños?, si son pocos los que ciertamente entienden el sueño en donde vive la humanidad casi que en su totalidad, comemos dormidos, nos vestimos dormidos trabajamos dormidos y pocas veces nos damos de cuenta de ese sueño donde vivimos. despertar del sueño humano es difícil, pues los intereses de entidades que controlan y gobiernan la voluntad humana hace poco probable hacer entender y comprender al humano del por qué y para qué se le fue asignado un nuevo amanecer en este plano tridimensional.
Así como existen, las escuelas los colegios y las universidades en el plano físico también existen las escuelas y universidades en el plano espiritual, lo que sucede es que en ese plano los avances y progresos tienen mucho más que ver con la naturalidad de la búsqueda que siempre ha tenido cada ser, despertar en este plano permite que en los otros el progreso sea mayor, es urgente vivir con los impulsos y la dedicatoria a los procesos.
Ciertamente el trabajo inicia cuando entendemos que todo es vano e ilusorio, todo pasa como el día de ayer y la noche de hoy que también pasa.

Todo esto cobra sentido cuando nos dedicamos, al trabajo día a día por la transformación de ese hombre errado que nuestra falsa personalidad, nuestro ambiente y nuestra sociedad equivocadamente ha creado.

La Ira, La codicia, La envidia, La lujuria, La gula, La pereza tienen sentido como meta de nuestro trabajo en esta esfera.

Trabajar tiene sentido cuando revisamos de momento en momento todas nuestras actuaciones. Todos los días escribimos nuestras actuaciones, y de ellas debemos dar cuenta
Debemos aprender, a conectarnos y a entender ese mundo interno y real de donde todo parte y a donde todo tarde o temprano todo debe llegar.