Para muchos es un absurdo pensar en la existencia de ésta ley, pero aun en medio de nuestra incredulidad, duda y el probable fanatismo de no creer en ella, por posturas ideológicas que tengamos en contra; la ley de la evolución y la involución actúa armónicamente con su hermana gemela.
Evolucionan las civilizaciones, desde sus desarrollos incipientes hasta los más grandes avances, también evolucionan los mundos, los soles, las galaxias, los hombres, los animales, los vegetales, todos los seres, tejidos, células y átomos (aunque la evolución de algunas de estas formas sean para nuestra interpretación mental difícil de comprender).
Recordemos que en cada forma y existencia de las cosas, internamente está su fuerza (todas las formas y cosas de los seres se resumen a lo más minimo los átomos y aun mucho más allá); cada átomo es una vida es una existencia, en cada uno de ellos fluye un ser.
Por ahora simplemente vamos a hablar de la evolución e involución de los seres en su contexto.
Entonces en cada ser existe una fuerza (espíritu), que lo anima o le genera la pasividad, y que en muchos casos les permite ser testigos mudos de cada acto de los hombres, es comprensible este hecho cuando el Bien amado Maestro jesús el Cristo dijo: si vosotros calláis, os aseguro que estas piedras gritarán. En las piedras encontramos espíritu de seres.La llama, fuerza o espíritu mora en cada ser. En el Hombre es el ciclo superior de ésta evolución.
Recordemos que los arcontes son seres creadores y crearon las almas de los seres, hombres, animales, vegetales, y formas minerales.
El ascenso de las almas, viene desde el reino mineral, sigue al reino vegetal, reino animal y después su alma es depositada en última instancia en un cuerpo humano.
Es aquí donde la sabiduría y el conocimiento del ser humano deben prevalecer, para apartarse de este ciclo de ronda eterna; y generar una revolución de su conciencia un despertar, para salirse de la involución y la evolución.
A todo ser humano se le da un número de oportunidades (108 vidas), para poder tomar conciencia de su naturaleza interior (Llama divina), si se termina este ciclo de cambio de vestido(cuerpo físico), la ley de la involución, opera inmediatamente y la alma de este ser es sacada e introducida a otro reino inmediatamente inferior, donde le tocará experimentar la cruda realidad de la que nos habla Dante en la Divina comedia, regiones inferiores de la naturaleza, que se penetran y comprenetran en el mundo físico.
Las almas en el mundo animal, son conocidas como animas, en el reino vegetal como los elementales, ondinas y nereidas, en el reino mineral como los gnomos y duendes; de igual manera como se da la involución, también acontece la evolución, las almas al llegar a la región inferior de estos planos son purificadas sus esencias y reinician un nuevo ascenso, empezando por el reino mineral, vegetal, animal y por último iniciar nuevamente con el ser humano.
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